Macri ordenó anular el nuevo protocolo para abortos legales y generó una nueva grieta en el oficialismo

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Tras una fuerte polémica en el oficialismo, el presidente Mauricio Macri le pidió a la ministra de Desarrollo Social y Salud, Carolina Stanley, que anule -el mismo día de su publicación en el Boletín Oficial- una resolución que actualizaba el protocolo para la Interrupción Legal del Embarazo (ILE)

«Van a revocar la resolución de la Secretaría de Gobierno de Salud por cuestiones de oportunidad, mérito y conveniencia, dado que tres organismos con competencia en materia de Niñez y Adolescencia, Mujer y Discapacidad no tuvieron intervención en la misma», dijeron a A24.com fuentes cercanas a Stanley.

En el Ministerio de Desarrollo Social dijeron que en la cartera que dirige Stanley «estamos trabajando para que mañana mismo salga publicado en el Boletín Oficial» la revocatoria del protocolo publicado este miércoles.

Mientras circulaban versiones sobre una eventual renuncia de Rubisntein, el único funcionario del Gabinete nacional firmante de la resolución, el martes se lo vio ingresar a la Casa Rosada, aunque no trascendió con quién se reunió justo un día antes de la publicación de la norma en el Boletín Oficial. lo que la hizo entrar automáticamente en vigencia.

Mediante una resolución publicada en el Boletín Oficial, la Secretaría de Salud actualizó este protocolo. La medida, más allá de sus alcances políticos y sanitarios era una declaración de principios de Adolfo Rubinstein, secretario de Salud y declarado defensor del aborto legal.

Uno de los primeros referentes del macrismo en salir a cuestionar la resolución fue el senador Federico Pinedo quien en su cuenta en Twitter cuestionó directamente al Secretario de Salud:

«El secretario de Salud de la Nación no puede pasar por encima de un debate de seis meses del Congreso Nacional y legislar por sí mismo, contradiciendo normas de rango constitucional».
Federico Pinedo.

Pero Rubinstein también sumó el apoyo de un referente radical de Cambiemos, Ernesto Sanz.
«Mi solidaridad, apoyo y afecto a @RubinsteinOk, un funcionario ejemplar, un lujo de la salud pública. Como tantos radicales a lo largo y ancho del país, nos sentimos orgullosos de su gestión»

¿Qué dice la actualización del Protocolo?

«La interrupción del embarazo es un procedimiento sumamente seguro si es practicado con los instrumentos y en las condiciones adecuadas. En los países donde el aborto está permitido por la ley y el personal de salud está capacitado para ofrecer servicios seguros, la tasa de mortalidad por estas prácticas es baja, de 0,2 a 2 muertes por cada 100.000 abortos», realza el documento.

«La actualización del Protocolo está diseñada en base a la comprensión fundamental de que todo el personal del efector de salud (incluyendo el administrativo y de seguridad) es responsable de garantizar y no obstruir el derecho a interrumpir un embarazo cuando éste ponga en riesgo la vida o la salud de la persona embarazada o cuando sea producto de una violación», dice el texto que acompaña los cambios.

De esta manera queda especificado que los tres motivos por los cuales se debe aplicar el protocolo son: «un peligro para la vida de la persona gestante; un peligro para la salud de la persona gestante (también la salud mental); el embarazo proviene de una violación (se trate o no de una persona con discapacidad intelectual o psicosocial)».

La decisión de la mujer sobre qué tipo de peligro está dispuesta a correr debe ser el factor determinante en la decisión de requerir la realización de una ILE»

Además, el documento define que las menores de 15 años siempre pueden solicitar la ILE porque se considera que un embarazo adolescente es un riesgo para la salud. Entre los 13 y los 16 años no hace falta consentimiento de los padres para realizar esta práctica si el tratamiento es con medicamentos.

Ni el hospital o personal médico ni las autoridades provinciales o nacionales pueden negarse a que se practique un aborto si el paciente lo solicita y cumple con las condiciones. Tampoco puede judicializarse la situación y el procedimiento debe ser confidencial.

Sí se contempla la objeción de conciencia. «Por lo mencionado, un/a profesional de la salud tiene derecho a ejercer la objeción de conciencia con respecto a la práctica de interrupción legal del embarazo, siempre y cuando no se traduzca en la dilación, retardo o impedimento para el acceso a esta práctica médica».

Fuente: A24

 

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